¿Has visto alguna vez un crash test? Son unas pruebas de choque con las que se examina la seguridad de los distintos modelos de vehículo que circulan por nuestras carreteras.

Para simular el impacto que recibe el cuerpo humano en un accidente, se utilizan unos maniquíes llamados “dummies”. Éstos llevan incorporados unos pequeños sensores que se encargan de aportar la información necesaria para evaluar la posible existencia de lesiones y su gravedad. Dependiendo del resultado de estas pruebas, a cada modelo se le otorgará hasta un máximo de 5 estrellas, puntuación que finalmente valorará la seguridad total que ofrece el vehículo.

Si conduces un coche con 5 estrellas Euro NCAP (Programa Europeo de Evaluación de Automóviles Nuevos), pero tu posición de conducción no es correcta, perderás parte de la seguridad que ofrece el vehículo en caso de accidente. Hoy te propongo 5 pasos que te ayudarán a entender la posición de conducción más cómoda, efectiva y sobretodo, segura.

  1. Altura del asiento: cuando buscamos una mayor visibilidad de nuestro coche y de la carretera, solemos adoptar una posición demasiado alta. Ver el capó o el primer metro de carretera de después, no es tan importante; lo verdaderamente importante es ver dónde vas, no dónde estás; por lo tanto, debemos alejar la cabeza del techo y del montante lateral (estructura entre puertas traseras y delanteras), bajando de esta manera la posición del asiento. Aún y así, si el cinturón nos queda en el cuello, deberemos subir el asiento hasta que éste se sitúe a la altura de la clavícula, priorizando siempre la correcta posición del cinturón.
  2. Posición de las piernas: Para entender esta posición, colocamos el pie izquierdo encima del embrague, tensamos la pierna al máximo, y si ésta queda semiflexionada, es garantía de que llegamos perfectamente a los pedales y en caso de accidente, las posibilidades de lesión grave se reducirán. Si nuestro coche es automático, realizaremos el mismo proceso, pero en este caso, en lugar de pisar el embrague, pisaremos el reposa-pies.
  3. Posición del respaldo: Si posicionamos el respaldo a unos 93/94 grados respecto el asiento, éste ejercerá una de sus funciones más importantes, no dejar que la fuerza centrífuga desplace en exceso nuestro cuerpo, haciendo así que nos cansemos menos y percibamos con mayor claridad el movimiento de nuestro coche. En caso de accidente, evitaremos que nuestro cuerpo salga disparado del vehículo todo y que llevemos puesto el cinturón de seguridad.
  4. Posición del reposacabezas: de la misma manera que con el respaldo, si pisamos el embrague y el freno al máximo, nuestra cabeza deberá quedar perfectamente apoyada en el reposacabezas para conseguir su posición óptima.
  5. Posición del volante: En cuanto a la altura, nuestra barbilla debe quedar alineada con la parte más alta del volante. La distancia la podemos medir situando nuestra espalda totalmente apoyada en el respaldo, después estiramos los brazos y nuestras muñecas deben quedar situadas en la parte más alta del volante. Frente un accidente, nuestra reacción natural será la de coger el volante con todas nuestra fuerzas, si nuestros brazos quedan semiflexionados, nos evitaremos lesiones realmente graves.

Si consigues tener una posición de conducción óptima, será más fácil que llegues a casa san@ y salv@, con el coche entero y, si es posible, con los dos retrovisores.